Exigen retirar campaña de Justicia Alimentaria que usa imagen de naranja podrida y perjudica mercados

La tensión aumenta en la Comunitat Valenciana tras la reciente campaña publicitaria lanzada por la Ongd Justicia Alimentaria, apoyada por el Gobierno español, bajo el eslogan «Los mercados se mueren». La Generalitat, la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) y las Cámaras de Comercio de la Comunitat Valenciana han hecho un llamamiento urgente para que la campaña sea descontinuada, alegando que esta daña seriamente la reputación de la naranja, un producto clave en la economía regional.

Fuentes representativas de la Generalitat, en un esfuerzo liderado por la consellera de Innovación, Industria, Comercio y Turismo, Nuria Montes, y la directora general de Comercio, Artesanía y Consumo, Maribel Sáez, envió una carta a los ministerios de Asuntos Exteriores y de Derechos Sociales. La carta solicitaba la «retirada inmediata» de la campaña publicitaria, que describieron como «de desprestigio y agresión» de los mercados municipales. Montes destacó que es «absolutamente inadmisible que el Gobierno central permita esta campaña de desprestigio y agresión injustificable» a los mercados municipales y a sus productos, que calificó como referente de calidad y gestión a nivel mundial.

La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) mostró también su descontento con la campaña. Rechazan particularmente la imagen de una naranja podrida presentada bajo el eslogan «Los mercados se mueren». El presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, comentó que la campaña puede «dañar gravemente el consumo en plena campaña al depreciar la calidad de las frutas nacionales».

Por su parte, las Cámaras de Comercio de la Comunitat Valenciana solicitaron la retirada de la campaña. Afirman que ésta causa daño a la imagen de la naranja, uno de los productos más representativos de la economía valenciana. Remarcaron que en la última campaña de 2023, España recogió 5,7 millones de toneladas de cítricos, 3 millones de los cuales fueron para exportación y eso representa más de 3.500 millones de euros.

Este conflicto subraya la importancia de los productos agrícolas y de los mercados locales para la economía regional. El incidente también destaca cuán delicada puede ser la gestión de la imagen pública de los productos y mercados clave, y cómo las decisiones tomadas a nivel gubernamental pueden tener un efecto de gran alcance en estos sectores.