El sector agropecuario de Ucrania se enfrenta a un año de dificultades sin precedentes, según los informes gubernamentales actuales. Se prevé una disminución del 10 % en la cosecha de grano, lo cual no solamente afectará la economía del país, sino que también causará fluctuaciones a nivel global. El mantenimiento de la capacidad de exportación a través de los puertos del Mar Negro, a pesar de las amenazas rusas, sigue posicionando a Ucrania como un proveedor global importante.
Los estimativos actuales muestran que los agricultores en Ucrania cosecharán un total de 74 millones de toneladas de grano y oleaginosas en 2024. Esto representa una baja considerable en comparación con las 82 millones de toneladas cosechadas el año anterior. Sin embargo, es importante precisar que estos pronósticos son preliminares y podrían ajustarse dependiendo de las circunstancias futuras.
Lamentablemente, los desafíos generados después de la invasión rusa están teniendo consecuencias devastadoras en la producción agrícola del país. A pesar de que la situación en el frente se mantiene relativamente estable, los bombardeos incrementados han reducido la cantidad de terrenos arables. Adicionalmente, los agricultores afrontan desafíos logísticos internos y externos, menores posibilidades de financiación, una disminución en la rentabilidad de los cultivos y la movilización de sus trabajadores.
Este contexto ha provocado que la cosecha de trigo ya no sea rentable en estos momentos, y se proyecta que caiga en un 13,5 %. Por otro lado, se espera que la producción de soja incremente en un 10 %, lo que se traduciría en 5,2 millones de toneladas a fin de año.
A las complicaciones mencionadas se suman los costos asociados a la desactivación de explosivos en los terrenos agrícolas. Según economistas locales, este costo asciende a cifras que varían entre los 12.000 y 25.000 millones de euros. Solo en la región de Járkov, la mitad de los terrenos agrícolas, equivalentes a 570.000 hectáreas, podrían estar contaminados con material explosivo.
La reducción en las exportaciones, que podrían caer a 43,7 millones de toneladas en 2024-2025, tendrá consecuencia sobre los precios a nivel global y afectará particularmente a países como España, Portugal y Grecia, así como algunos países africanos y asiáticos.
En respuesta a estos desafíos, Ucrania ha podido mantener activas sus rutas de exportación a través del Mar Negro y del río Danubio, a pesar de las constantes amenazas militares de Rusia. A la fecha, el país ha podido exportar hasta 5,8 millones de toneladas de productos agrícolas al mes. No obstante, estas capacidades de exportación son provisionales y estarán sujetas a una serie de factores, como los cambios en la situación militar.
